No te mudes en parásito de larvas ajenas.
Muchos saben imitar, pocos saben crear.
La verdad exhibida se hace objeto promiscuo, incita al robo.
Retiene tu hambre mental, no devores lo que vocean como alimento supremo, no tragues artificios.
Nadie puede robar lo esencial, nadie puede nutrirse de lo ajeno.
La luz del otro sólo es sombra de tu luz.
No ambiciones lo que el ídolo posee.
Regresa a tu propio caos.
Alejandro Jodorowsky
Fotografía de Martin Oeggerli
viernes, 30 de abril de 2010
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