jueves, 28 de octubre de 2010

Contradicción Aparente


A veces es necesario guardar silencio para ser escuchado.

1 comentario:

  1. Vivimos en un mundo donde a menudo existe un gran grado de ruido y confusión, dónde la gente va a menudo corriendo y a lo suyo y no se percata de los demás. Incluso nosotros mismos nos dejamos arrastrar por esa carrera descontrolada y sin rumbo. Esta frase me hace imaginar a un monton de gente, cientos de personas que se han reunido en una gran explanada donde acudirá un rey, que cada x años acude a este lugar para conceder tres deseos a sus súbditos. Cuándo aparece todos empiezan a chillar pidiendo cada uno su deseo. Es imposible oirlos y oirse, todos gritan cada vez más. El rey los observa sin oirlos y de repente el rey se fija en un súbdito que no gesticula, que está callado y solo le mira. Entonces el rey alza la mano y mándando callar a toda la gente, le señala y le dice que se adelante preguntándole que si él no pide nada. El hombre le contesta que para qué gritar si no va a oirle, entonces el rey le dice que pida su deseo y que lo tiene concedido.
    A menudo hacemos tanto ruido y emitimos señales tan desesperadas para hacernos oir entre los demás, que solo conseguimos que alguién se fije en nosotros cuando le mostramos simplemente nuestra persona, entonces conseguimos que se fije en nosotros y ser escuchados. Y creo que nos pasa lo mismo con nosotros mismos. Necesitamos parárnos, detenernos de la carrera continua en la que estamos inmersos y escucharnos, dejar simplemente que se oiga nuestro corazón para saber qué es lo que queremos reálmente.

    Bueno MaLaura, menudo rollo te he metido. Cómo siempre, me gustan tus post, que tanto fondo tienen detrás.
    Un beso grande y silencioso.

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